Canadá – Las jóvenes hablan de su derecho a la educación

"Tengo derecho a recibir una educación". Con estas palabras Sanju K.C me explicó por qué la educación es importante para ella y por qué pasó tres meses adquiriendo conocimientos de informática en el Nepal Jesuit Social Institute (NJSI), socio del CJI, para prepararse mejor para la universidad. Ahora es profesora en la escuela católica Don Bosco de Katmandú (Nepal).

La educación es un derecho humano. Sin embargo, es un derecho al que muchas personas, especialmente las niñas del sur global, no tienen acceso. En todo el mundo, entre 129 y 130 millones de niñas están sin escolarizar y se les niega su derecho a la educación. El impacto de esta situación en el bienestar social y económico de las comunidades y los países es significativo.

La educación puede transformar la vida de una persona y empodera a las comunidades marginadas. Fui testigo directo de ello cuando Juan Emilio Hernández, Coordinador de Programas del CJI, y yo visitamos a nuestros socios jesuitas en India y Nepal en primavera.

Conocimos a muchas mujeres, hombres y niños inspiradores que trabajan para mejorar no sólo sus vidas, sino también para servir a sus comunidades. Para ellos, recibir una educación es crucial. Ritu Pana recordó los sacrificios que hicieron sus padres para que ella y sus hermanos pudieran ir a la escuela. "Nuestros padres pasaron penurias, pero dieron prioridad a nuestra educación, aunque no tuvieran qué comer", dice Pana, que trabaja en el Centro de Investigación para el Desarrollo de la Vida Humana (HLDRC), un proyecto de la provincia jesuita de Darjeeling, en la India. Hoy, ella y su equipo trabajan duro para convencer a los padres empleados en las plantaciones de té de que envíen a sus hijos a los centros de estudio del HLDRC, que ofrece educación no formal gratuita a los niños. "Queremos mostrarles lo que es posible".

Este otoño, la CJI lanzará una campaña sobre el derecho a la educación, con el lema "La educación: Su derecho, nuestro futuro". Su objetivo es concienciar sobre la importancia de la educación, especialmente la de las niñas, para determinar nuestro futuro colectivo.

También pretende abordar algunos de los obstáculos. Sanju K.C reconoce que la pobreza se interpone en el camino de la educación. Ella misma quiere obtener un máster, pero no puede hacerlo porque mantiene a su familia. Por ahora, intenta ahorrar lo que puede de su escaso sueldo.

En este boletín nos cuentan nuestros socios de África y Asia cómo se niega a las personas con las que trabajan el derecho más básico a la educación y por qué han hecho de la educación una prioridad de su trabajo. Les apoyamos en sus esfuerzos, pues no podemos permitir que esta injusticia continúe.

Fuente : Canadianjesuitinternational.ca

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Publicado por SJES ROME - Coordinador de Comunicaciones in SJES-ROME
SJES ROME
El SJES es una institución jesuita que ayuda a la Compañía de Jesús a desarrollar la misión apostólica, a través de su dimensión de promoción de la justicia y la reconciliación con la creación.

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